Solo una persona de cada 10 en el planeta puede disfrutar de aire puro, según datos de la OMS. El aire contaminado y tóxico es responsable de entre 25% y 33% de las muertes por ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares, cáncer de pulmón y otras enfermedades respiratorias.
“Sabemos que la contaminación del aire es el principal factor de riesgo para la salud ambiental a escala mundial“.
Susan C. Anenberg, autora principal del estudio Estimates of the Global Burden of Ambient PM 2.5, Ozone, and NO2 on Asthma Incidence and Emergency Room Visits.
Organizaciones mundiales como la OMS, nacionales, locales e incluso iniciativas ciudadanas están esforzándose por hacer más pedagogía sobre la importancia de la calidad del aire y la incidencia en la salud, en todo tipo de poblaciones. Pues “ni siquiera el sida, la tuberculosis y la malaria juntas causan tantas muertes como el aire sucio”, destaca El Tiempo en su especial ‘Contaminación del aire: un asesino anda suelto’.
Es en este escenario en el que el hardware y el código abierto aparecen como herramientas para medir la calidad del aire, crear conciencia y promover acciones para reducir su contaminación.
[su_box title=”Nota: Guías de calidad del aire” style=”soft” box_color=”#0f1dc0″]La OMS incluye en el documento ‘Guías de calidad del aire’ cuatro contaminantes comunes del aire: material particulado (MP), ozono (O3 ), dióxido de nitrógeno (NO2 ) y dióxido de azufre (SO2 ). El material particulado se define en PM10 y PM2.5, partículas muy finas e imperceptibles al ojo humano. Ambas partículas llegan a los pulmones perjudicando la salud. Y la fuente principal de emisiones de PM es el tráfico rodado, en particular por los vehículos diesel.[/su_box]
Levantando data de la calidad del aire en Bogotá
Daniel Bernal, ingeniero electrónico, se preocupó por la calidad del aire en Bogotá hace aproximadamente 2 años y meses después comenzó a medirlo por su cuenta. En ese entonces usaba sensores y publicaba sus hallazgos en Twitter. Con el tiempo llegó a tener difusión en el programa Zona Franca, que fue visto por Antonio Vanegas, “experto en aplicaciones y sistemas”, según lo describe Bernal, quien también venía trabajando en el mismo tema a través de: CanAir.io.
CanAir.io es una iniciativa ciudadana que nació en Bogotá, para monitorear la calidad del aire por medio de sensores de material particulado conectados a un teléfono móvil. Se trata de un esfuerzo colaborativo enriquecido por la participación de los ciudadanos.
2. Este ejemplo es bueno porque el viaje es muy corto y se alcanzan a medir picos de 145 ug/m3 en una hora de poco tráfico. El bus lo tomé en la estación Carrera 90 y me bajé en la Minuto de Dios. Con @canairq se facilita mucho las mediciones y se ve bonito 👍 pic.twitter.com/8uix8kUsYH
— Daniel Bernal (@danielbernalb) October 11, 2018
Pero más allá de ser una red de ciudadanos, CanAir.io facilita y promueve el uso de la tecnología y la innovación para medir el aire, porque a través de GitHub comparte toda la información y guías, necesaria para que los ciudadanos construyan sus propios dispositivos para medir la calidad del aire, el cual funciona por medio de una aplicación homónima disponible en Android.
Lo que busca esta iniciativa es poder “construir un mapa que nos permitirá saber qué estamos respirando y cómo podemos mejorar la calidad de vida”, según su información oficial. La idea también es poder contrastar esta información con las cifras oficiales.
Además de ser una solución más que oportuna —en un momento en que las instituciones parecen dar la espalda y es la ciudadanía la que se moviliza en defensa de la calidad del aire—, es también un recurso útil e incluyente, porque las personas no necesitan tener estudios en ingeniería o carreras similares para poder usarlo.
“Si dibujas, lees, escribes o estás en una empresa o con un grupo de personas que están interesados en vivir en una ciudad saludable, seguro puedes vincularte”.
¿Cuál es la importancia de iniciativas como esta?
El impacto de estas iniciativas, aunque aún es bajo, es prometedor. Como se ha analizado por diferentes instituciones, la ciudadanía es cada día más consciente de temáticas como el medio ambiente y se convierten en un mecanismo de presión. Sin embargo, más allá de la pasión por el tema iniciativas como CanAir ofrecen un elemento clave y valioso: el dato. La evidencia de lo que hay.
Bernal recuerda el caso de Mike Ceaser, fundador de Bogota Bike Tours y autor del blog ‘Mike’s Bogota Blog’. Él comenzó a registrar imágenes de las nubes de humo tóxico que expedían los buses de TransMilenio. Si bien las imágenes generan un impacto visual fuerte, no fueron suficientes para empujar más el trabajo de sensibilización alrededor del tema. Hoy, la tecnología, la innovación y la ciencia (TIC) “nos fortalece, porque Mike tenía una forma de mostrar el tema, pero no tenía insumos para recoger datos como los que ofrecen estos dispositivos”.
Por ejemplo, hoy saben que, de los monitoreos que han hecho, una de las estaciones que presenta los mayores índices de contaminación es la de Museo Nacional, “en promedio registra entre 450 y 600 microgramos por metro cúbico de 2.5µm.”, y a diferencia de otras estaciones estos índices son constantes.
Actualmente CanAir ha logrado que 20 personas, por cuenta propia, haya construido sus dispositivos de monitoreo de calidad del aire. Sin embargo para levantar mas datos y fortalecer esta iniciativa ciudadana hace falta eso, más ciudadanos conscientes y que quieran aportar.
En Colombia estas iniciativas, específicamente de calidad del aire, aún son escasas pero existen. Además de CanAir existe Unloquer, que nació en Medellín.
Y comenzamos a armar kits para medir calidad del. Aire <3
Ya algún peque con 6 años armo el suyo, quien de anima? pic.twitter.com/lZJoMhmbFX— unloquer (@unloquer) October 13, 2018
¿Quieren construir su propio dispositivo? En el sitio Hackers.io están todas las instrucciones en español, con la lista de materiales y recomendaciones con lo necesario para hacerlo. Además de medir la calidad del aire en Bogotá los usuarios puede colaborar de diferentes maneras. Por ejemplo, si son desarrolladores y quieren ayudar a mejorar la aplicación, solo es necesario entrar en contacto con ellos.
Y mientras tanto…
Como es de conocimiento público, Bogotá recibirá una nueva flota de buses que funcionan con diesel, y se integrarán a un sistema que más que movilidad, aporta contaminación a la ciudad y con ello deteriora la salud de los ciudadanos. En total 386 biarticulados y 286 articulados serán Euro V diésel.
Si bien la administración distrital busca minimizar el impacto pregonando que la nueva flota viene con “tecnologías que evitarán que la contaminación se la ciudad sea mayor”, probablemente algo más efectivo hubiera sido una flota con energías limpias, como la eléctrica. Bogotá pudo haber dado un salto cualitativo hacia un sistema de transporte masivo de energías limpias.
Paralelamente, hay otros sectores que entienden la importancia de la calidad del aire, no para la salud, sino para metas nacionales. En la Conferencia CAF el viceministro de desarrollo empresarial Saúl Pineda se refirió al tema y aseguró que “la calidad de vida juega un rol muy importante a la hora de trabajar en elementos para mejorar la productividad”. El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez también intervino:
“Uno puede tener discusiones de todo tipo, pero hay una cosa en común que tenemos todos y es el aire que respiramos”: @FicoGutierrez. El alcalde de Medellín también dice que en 2019 se reemplazará la flota del @Metroplus_SA por buses 100% eléctricos. #ProductividadCAF ?? pic.twitter.com/oE1AeHR4G2
— Impacto TIC (@ImpactoTIC) 7 de noviembre de 2018
Foto: José Muñoz (vía Flickr, CC).