Gran parte de la versatilidad de nuestros teléfonos inteligentes –dispositivos cuya importancia en nuestra vida diaria es cada vez mayor– se basa principalmente en el hecho de que no debemos estar conectados por cables, y en que no tener que estar conectados a la pared es una ventaja inmensa en un mundo que se mueve cada vez más rápido.
Sin embargo, también es cierto que nuestros teléfonos dependen en gran medida de su batería. Cuando hablamos de especificaciones de los teléfonos, en ocasiones la batería no es uno de los elementos más mencionados. Después de todo, la batería es uno de esos elementos esenciales que no vemos, pero que seguramente sí sentiremos a la hora de utilizar nuestro teléfono. Esto es especialmente verdad para usuarios pesados, que utilizan su teléfono para aplicaciones demandantes como videojuegos o streaming.
Entendiendo mejor las baterías
En la actualidad, la gran mayoría de nuestros teléfonos utiliza baterías de litio recargable. Estas baterías a su vez pueden ser Li-ion (ion de litio) o LiPo (polímero de litio). En términos generales, el polímero tiene mejores resultados que la batería de ion de litio, y por este motivo son usadas ampliamente en teléfonos inteligentes para lograr una mayor duración.
Para medir la capacidad de cualquier batería se usan los amperios, abreviados con la letra A. Mientras que baterías grandes, como las de carros eléctricos, se miden en amperios, las baterías de teléfonos se miden en miliamperios y se abrevian con mA. Por último, los fabricantes también miden la energía total que puede entregar una batería en una hora, de donde obtenemos miliamperio por hora –mAh–.
Acá vale la pena notar que, generalmente, entre más grande sea el número, más tiempo durará la batería. Entonces, por ejemplo, una batería de 4.000 mAh tiene más duración que una de 3.500 mAh. Sin embargo, las baterías más grandes tienden a necesitar de un espacio físico mayor, y por eso solamente solemos verlas en dispositivos de 6,5 pulgadas para arriba. A la inversa, los teléfonos plegables sufren de baterías pequeñas debido a que no tienen espacio físico suficiente para una batería grande –como el Motorola Razr 5G y su batería de 2.800 mAh–.
En el terreno de los teléfonos, generalmente es mejor tener una batería grande que una pequeña, siempre y cuando esto no signifique un teléfono gigante. Por lo general, es recomendable buscar teléfonos entre 4.000 y 5.000 mAh. De hecho, según una encuesta de MediaTek, los usuarios de teléfonos buscan cada vez más baterías que duren más, y los fabricantes han tomado nota en los últimos 2 años.
Mejoras en software y hardware
Así como la capacidad de las baterías ha venido en aumento a través de los años, algunas de las mejoras más importantes también vienen por parte del chip y el software del teléfono. Estas mejoras han traído la creación de estándares como el de la carga rápida, o una mejor optimización a nivel de software que utiliza mejor los componentes del equipo.
El fabricante de chips MediaTek, por ejemplo, ha implementado carga rápida en muchos de sus SoC. El Realme 6, un teléfono con una batería de 4.300 mAh y un chip Helio G90T, puede ser cargado al 80 % en alrededor de 30 minutos. Si nos imaginamos 2 teléfonos con la misma capacidad de batería, por ejemplo 4.000 mAh, es mucho más conveniente que podamos hacer una carga completa en 55 minutos a que la hagamos en 2 horas.
Por otro lado, las optimizaciones también pueden integrar mejor el hardware y el software del dispositivo. El Samsung A32, por ejemplo, tiene una pantalla Amoled que entrega colores mucho más brillantes y un chip MediaTek Helio G80. Una ventaja de las pantallas Oled es que su iluminación es hecha pixel a pixel, lo que significa que cualquier pantalla en negro se traduce en pixeles apagados y, por lo tanto, menor consumo de batería.
Este tipo de teléfonos puede, por ejemplo, mostrar pequeñas notificaciones sin necesidad de iluminar la pantalla entera, reduciendo así el consumo de batería a lo largo del día. De la misma forma, los chips de MediaTek pueden alternar entre distintas tasas de refresco automáticamente dependiendo del contenido que estamos mirando. En muchos casos, una buena integración en el chip significará mejores características sin sacrificar batería.
5 tips importantes
Así como solemos tener hábitos para proteger nuestros teléfonos físicamente, la batería también puede ser protegida y podremos extender su vida útil.
- Es mejor no dejarlo conectado por la noche. Aunque no nos arriesgamos a causar daño a nuestro teléfono gracias a tecnologías integradas en la batería y el software, lo cierto es que sí estamos utilizando mucha más energía que si no lo hiciéramos.
- A veces no necesitamos ir a 100 %. Para proteger la duración de nuestra batería a largo plazo, es mejor que su carga siempre esté entre 15 y 80 %. Dejar descargarla a 0 % o cargarla constantemente a 100 % tiene el riesgo de acortar su vida útil meses o años en el futuro.
- Revise sus aplicaciones. Muchas de las aplicaciones que instalamos requieren funcionar constantemente, lo que también drena lentamente la batería del teléfono, incluso si no lo estamos usando. Es recomendable revisar y desinstalar aplicaciones poco o nunca utilizadas.
- Brillo automático. La pantalla es uno de los elementos que más consumen batería, y tener la pantalla con el máximo brillo drenará la batería muy rápido. Lo recomendable es tener activado brillo automático y ajustarlo manualmente si es necesario.
- El software también ayuda a monitorear. Android tiene integrados sistemas de monitoreo en el uso de batería, y también existen aplicaciones como AccuBattery que muestran información detallada de qué aplicaciones consumen más batería.
La batería es uno de los elementos más importantes en nuestros teléfonos. Después de todo, gran parte de su movilidad se debe gracias a los desarrollos de la ingeniería en baterías que cada día le entregan poder a nuestros dispositivos. Así como MediaTek y otros fabricantes buscan alarga la vida de las baterías, nosotros los usuarios también podemos aportar para utilizar mejor nuestros dispositivos.
Imagen principal: Markus Winkler en Unsplash