La Colombia del presente, ¿poco preparada para el trabajo del futuro?

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Publicado el 30 Ene 2020

Futuro del trabajo

Hablar del futuro del trabajo es como romper una piñata: salen y salen variables, conceptos, cifras, estudios, proyecciones, perspectivas y todo tipo de información que al final del día pueden decirnos todo y nada. Y aunque puede ser un asunto incierto, si de buscar coincidencias entre todas las fuentes disponibles se trata, hay cosas recurrentes: la importancia de la tecnología, talento calificado y el cambio acelerado.

Desarrolladores, analistas y científicos de datos, diseñadores UX, expertos en ciberseguridad, hackers éticos, estrategas y líderes en diferentes áreas digitales son los profesionales más referenciados. Unos con conocimientos altamente técnicos y otros con habilidades blandas como protagonistas.

Desde el Ministerio TIC, en Colombia, la estrategia de Talento Digital se centrará en el fortalecimiento y desarrollo de habilidades y competencias en programación, pensamiento computacional, industrias creativas y talento digital, enfocadas en niños y niñas de colegios públicos. En cuanto a temas de Cuarta Revolución Industrial, el foco estará en ciencia de datos, Inteligencia Artificial, Blockchain, ciberseguridad, Full Stack y analítica de datos, entre otros.

Por su parte, la plataforma de trabajo digital Citrix nos dice que para 2020 la automatización va a destruir 40 millones de trabajos, pero que también creará más de 65 millones nuevos, que “140 años de información (data) muestran que la tecnología ha creado más trabajos que los que ha destruido” y que las empresas están invirtiendo enormes cantidades de dinero para reentrenar a sus trabajadores. En el caso de Amazon, la suma será de más de 700 millones dólares, solo en Estados Unidos, de aquí a 2025.

[su_note note_color=”#4479B8″ text_color=”#333333″ radius=”3″ class=””]Lea también: Programación (¿la carrera de 2020 en Colombia?) y otras alternativas de estudio.[/su_note]

Según el punto de vista de la consultora Deloitte, el empleo se dividirá en tres áreas: los trabajos estándar (roles que utilizan un conjunto de habilidades específicas y limitadas, generalmente repetitivos), trabajos híbridos (que combinan habilidades técnicas y blandas) y los supertrabajos (que combinan el trabajo y las responsabilidades de múltiples trabajos tradicionales, utilizando la tecnología para aumentar y ampliar el alcance).

Y en su reporte sobre el trabajo del futuro, Foro Económico Mundial (FEM) nos decía que los impulsores del cambio serían cuatro avances tecnológicos específicos: Internet móvil de alta velocidad, Inteligencia Artificial, Big Data y la tecnología en la nube “dominarán el periodo 2018-2022”, es decir, el actual.

Desde la perspectiva de las empresas, 50% espera que la automatización conduzca a una reducción en su fuerza laboral de tiempo completo para 2022. Pero, al mismo tiempo, 38% espera extender su fuerza laboral a nuevos roles que mejoren la productividad. En general, las empresas están dispuestas a usar más contratistas que realicen trabajos especializados, así como involucrar a sus trabajadores de una manera más flexible, de manera remota, más allá de las oficinas físicas.

En Colombia, las expectativas pueden ser un poco más modestas si se comparan con el contexto internacional. Hay que tener en cuenta que recién a finales de 2019 se realizó en el país la subasta del espectro electromagnético con el cual se deberán actualizar las redes de telecomunicaciones actuales a 4G en un plazo de máximo 5 años. Es decir que, siendo optimistas, será después de 2024 cuando se vean saltos de velocidad en cuanto a Internet Móvil. Mientras siga existiendo la brecha de conectividad, hablar del trabajo del futuro es complejo, pues gran parte de la evolución del mercado laboral depende de ella.

En el reporte sobre despliegue de infraestructura de telecomunicaciones en América Latina, publicado por 5G Américas en enero de 2020, se señala que, “a pesar de que en los últimos años las autoridades de la región han ido adoptando medidas para agilizar el despliegue de infraestructura dentro de sus territorios, los operadores de telecomunicaciones aún enfrentan grandes desafíos en América Latina. Una de las principales barreras en este sentido continúa siendo la burocracia de las normas a nivel municipal, e incluso las contradicciones que pueden existir entre las reglas, trámites y procedimientos a distintos niveles de Gobierno”.

Así las cosas, en Colombia seguiremos algo alejados de las proyecciones globales del citado estudio, pues recordemos que aún son “20 millones de colombianos” que no están conectados. Ya en 2019, el ex ministro TIC Diego Molano nos decía: “La verdad es que los colombianos somos muy triunfalistas”, y lo cierto es que es necesario poner cada cosa en su lugar. “Una cosa es analizar las tendencias a nivel global;otra, a nivel local, y otra entender realmente cómo impacta”, nos comentó Agostinho Almeida, director para la Cuarta Revolución Industrial de Colombia.

El trabajo del futuro y el contexto colombiano

El viceministro de economía digital, Germán Rueda, explica que las metas de los proyectos planeados se establecen anualmente, teniendo en cuenta los recursos disponibles y las necesidades de formación que vaya requiriendo el sector. Para 2020 las metas incluyen:
  • Más de 86.000 estudiantes de colegios públicos colombianos serán beneficiarios de la estrategia de Talento Digital.
  • Más de 10.000 colombianos podrán capacitarse en habilidades requeridas para la Cuarta Revolución Industrial.

Resaltaba el FEM que, en cuanto a las cadenas de producción, se espera que para 2022 el 59% de los empleadores haya modificado la forma en que producen y distribuyen, y casi la mitad espera haber modificado su ubicación geográfica, por lo que se prioriza la disponibilidad de talento local calificado como su principal consideración, por encima de otros factores como la flexibilidad de las leyes laborales locales, los efectos de aglomeración de la industria o la proximidad de las materias primas.

Pero aterrizando realidades, solo en cuanto a empresas se trata, Colombia Productiva nos dice que al menos un 70% de las compañías del país aún no está preparado para la Transformación Digital. Por eso mismo es que nace la necesidad de impulsar los cambios, porque aunque se sabe que hay que hacerlo, del dicho al hecho aún hay mucho trecho.

Antes siquiera de hablar de tecnologías avanzadas y Transformación Digital es prudente retroceder un poco: ¿cómo está el país en educación y trabajo? De acuerdo con la estadística de Fuerza laboral y educación del Dane, para 2018, la tasa global de la población que reportó no estar asistiendo a preescolar, escuela, colegio o universidad fue 72,9% .

El mismo documentos nos dice que la tasa de desempleo de las mujeres que completaron la educación universitaria fue 11,2% y la de los hombres 9,0%. 

Y en cuanto a educación media, la tasa de mujeres desempleadas fue 15,7%, mientras que la tasa de los hombres sin trabajo fue de 9,5%, en el mismo periodo. Hay desempleo, brechas de género y de educación. Y los jóvenes constituyen uno de los públicos principales, pero en 2018 se registró una caída en la cantidad de matrículas, por segundo año consecutivo.

Fuente: Ministerio de Educación.
Fuente: Ministerio de Educación.

El reporte del Sistema Nacional de Información de la Educación Superior, del Ministerio de Educación, reveló que 2.363.766 estudiantes se matricularon en Instituciones de Educación Superior (IES) en el segundo semestre de 2017, pero en el mismo periodo de 2018 la cifra bajó a 2.324.760 –esto quiere decir, 39.006 estudiantes menos–. Ese bajón provino, en su mayoría, de una de las instituciones más importantes del país, del Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena), que presentó 36.616 estudiantes menos en ese periodo.

El Sena es una de las instituciones que promueven el emprendimiento y un aliado de diferentes iniciativas en distintas regiones de Colombia. Estas caídas son una alarma y a esto se suma que específicamente carreras de tecnología no están despertando suficiente interés.

Alta necesidad pero bajo interés por la tecnología

Según la Caracterización de la Brecha de Talento Digital 2015 del Observatorio TI de Fedesoft, existe una baja intención de los jóvenes por estudiar carreras relacionadas con Tecnologías de la Información (TI). “Esto resulta preocupante frente a la proyección del sector, pues el observatorio señala que para el 2020, la demanda de  talento digital podría llegar a ser de 123.918 profesionales, aumentando a un ritmo vertiginoso frente al total del empleo calificado en el país”, agregó el viceministro Rueda.

[su_note note_color=”#FCF3CF” text_color=”#333333″ radius=”3″ class=””] Consulte aquí las IES que más estudiantes perdieron.[/su_note]

Este es un tema para analizar desde diferentes perspectivas, ya que, por ejemplo, uno de los cambios que ha traído la tecnología es el que las empresas ya no busquen personas por sus título sino por sus habilidades. Que hay que estudiar cosas relacionadas con tecnología y que se puede hacer desde casa también se pregona con fuerza. Por eso, nuevas opciones de educación aparecen como una solución, aunque por lo general sus estudiantes ya son profesionales y tienen cierto nivel adquisitivo para costear estos cursos, como compartía previamente el fundador de Acámica. En cualquier caso, dependen también de herramientas como conectividad y dispositivos. 

hogares con computador
Fuente: DANE.

La última Encuesta de Calidad de Vida (ECV) del Dane (que encuestó 89.522 hogares, logrando una cobertura del 98,6%), correspondiente a 2018. Allí se muestra que hay zonas donde, además de la conectividad, el acceso a las herramientas básicas como un computador (de escritorio o portátil) o una tableta, es aún bajo.

La misma encuesta, en su apartado sobre uso de la tecnología, encontró que el 82,2% de los encuestados usa Internet para acceder a redes sociales; el 59,3%, para conseguir información; el 54,1%, para servicios de correo y mensajería, y el 34,5%, para estudiar. Formarse a través de Internet está en la cola de las prioridades. Y si se miran los porcentajes por ubicación el panorama varía aun más.

 A eso se le suma que el 44,8% del total nacional no usa Internet porque no sabe cómo hacerlo; el 24, 2%, porque no lo considera necesario, y el 18,1%, porque lo considera muy costoso.

Fuente: DANE.
Fuente: DANE.

Pasando a los análisis internacionales, la Comisión Mundial sobre el Futuro del Trabajo, de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), señala que “los avances tecnológicos –la inteligencia artificial, la automatización y la robótica– crearán nuevos puestos de trabajo, pero quienes van a perder sus trabajos en esta transición podrían ser los menos preparados para aprovechar las nuevas oportunidades”.

Esto no significa que no existan iniciativas, las hay. El viceministro explica que en la estrategia de Talento Digital, el Ministerio TIC “diseña, adopta y promueve programas para el desarrollo del talento de los colombianos con el fin de lograr su  transformación digital, mejorar su calidad de vida y contribuir al desarrollo sostenible del país. Esta estrategia busca acompañar al ciudadano durante todo su ciclo de vida, con múltiples programas para todas las edades que permiten el desarrollo de habilidades digitales”, desde temprana edad, hasta profesionales. Para 2020 se desarrollarán los siguientes proyectos:

  • Programación para niños y niñas: dirigido a docentes de colegios públicos para que se entrenen en lenguajes de programación y a su vez transfieran estos conocimientos a los estudiantes beneficiados.
  • Currículos Digitales: dirigido a colegios que se encuentren interesados en implementar nuevos currículos para la formación media en habilidades digitales.
  • Code.org: para docentes de colegios públicos que a su vez transferirán los conocimientos en pensamiento computacional a los estudiantes beneficiados.
  • Talento digital para empresas: para empresas colombianas que deseen que sus colaboradores se capaciten o fortalezcan sus habilidades digitales en áreas de la cuarta revolución industrial.
  • Ciencia de datos: dirigido a colombianos que deseen capacitarse o fortalecer sus habilidades digitales en Ciencia de Datos.
  • Inteligencia Artificial: dirigido a colombianos que deseen capacitarse o fortalecer sus habilidades digitales en Inteligencia Artificial.
  • Ruta Stem: dirigido a los colombianos de los municipios focalizados dentro del proyecto, como estrategia para la formación en áreas Stem+A (ciencias, tecnología, ingeniería, matemáticas y artes), que promueva el desarrollo de competencias digitales en niños, jóvenes y adultos, e incentive el interés por el aprendizaje de las ciencias de la computación y el desarrollo del pensamiento computacional.

Algo similar expone el informe de desarrollo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), pues evidencia que las inequidades son más grandes en tecnologías avanzadas, solo tomando como ejemplo la conectividad. Hay una “equidad perfecta” en cuanto a suscripciones móviles, pero si de casas con computador o de banda ancha se habla, la inequidad aparece. Y de nuevo: en un país donde “hay más de 20 millones de colombianos” desconectados, es difícil pensar en un futuro del trabajo para todos.

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Foto de portada:  Gerd Altmann (Pixabay)

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Sandra Defelipe Díaz

Soy periodista, productora, formadora y emprendedora digital, y tengo el orgullo de ser la integrante más antigua de Impacto TIC, lo que ha hecho que este sea mi principal espacio de formación continua. También les tengo historias de capoeira, cultura y de Tenjo, Cundinamarca. Sandra fue periodista de Impacto TIC desde antes de su fundación hasta 2022, y sigue colaborando.

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