La guerra en el mundo de los procesadores está en un momento álgido. Los dos bandos dan golpes que sacuden al mercado y, para 2020, la pelea se va tornar todavía más intensa. Impacto TIC ha tenido la oportunidad de hacer notas de experiencia de uso con celulares inteligentes, pero esta vez incursionamos en el mundo de los computadores, donde la competencia adquiere otras dimensiones.
En nuestra nueva Esquina Técnica tuvimos la oportunidad de ‘cacharrear’ con uno de los últimos modelos de Asus, presentados a principios de 2019 en el CES (la feria de electrónica de consumo que se realiza cada año en Las Vegas). Además de contar con uno de los nuevos procesadores portátiles de AMD, también tiene una GPU Vega del mismo fabricante. Vale la pena anotar que en muchos programas se detectan 2 GPU dentro de la máquina. Esto se debe a que el procesador Ryzen también cuenta con un chip discreto para procesar gráficos de baja intensidad.
En el mercado existen dos versiones de este equipo: la primera es la más económica y no cuenta con GPU dedicada; la versión que tuvimos en prueba cuenta con un chip AMD Radeon 540X dedicado.
Las promesas de este equipo son bastantes altas. El precio en el mercado colombiano es de $2.799.000, lo que lo pone en competencia directa con las gamas media premium y alta, sin llegar todavía a terreno de gamers. Dando un primer vistazo, el equipo es bastante agradable y ligero en las manos. El cargador, de igual manera, tiene el diseño moderno de Asus que vuelve todo el paquete mucho más móvil.
Nuestro análisis, por lo general, estuvo basado en pruebas que muestran el rendimiento en ambientes productivos y de trabajo. Videojuegos y pruebas de gráficos, por lo general, aunque corren con FPS y velocidades decentes, pueden tornarse bastante pesadas dependiendo de la aplicación. De la misma forma, la temperatura del paquete puede ser bastante alta, sobre todo en tareas de larga duración, como horas de procesamiento de renders o de videojuegos.
Esta es la reseña del Asus VivoBook15 X512DK:
Especificaciones
El VivoBook 15 cuenta con un procesador AMD Ryzen 5 3500U de tercera generación. La terminación en U significa que hace parte de la línea móvil de APU que integran una GPU discreta además de la CPU. Al ser Ryzen 5, la CPU cuenta con 4 núcleos y 8 hilos de procesamiento.
Esta APU soporta hasta 32GB de RAM DDR4 corriendo a 2.400MHz, aunque el producto que evaluamos tiene solamente 8GB. Esta CPU de AMD está basada en tecnología de 12nm, que queda un poco rezagada en términos de consumo de energía con respecto a los nuevos procesadores de 7nm.
La frecuencia base de la CPU es de 2,1GHz con un modo turbo que llega hasta los 3,7GHz cuando existen aplicaciones demandantes. Al ser un chip para portátiles, la potencia de diseño térmico es de 15W; bastante respetable si tenemos en cuenta que está pensado para ser un equipo de gaming y producción ligero.
La APU viene también con una extensión gráfica Radeon 540X con 2GB de memoria de video dedicada. Este componente tiene 8 núcleos gráficos que corren a 1.200MHz y está basado en la tecnología Vega 8 de AMD.
El VivoBook cuenta un disco de estado sólido con capacidad de 512GB, aunque existe una versión que incluye también un disco duro con capacidad de 1TB. El disco de estado sólido hace que el equipo responda bastante bien y que las tareas del día a día, como navegar por Internet o ver contenido en alta definición, se ejecuten sin percances.
Los videos también se muestran bien en la pantalla de 15,6 pulgadas, con colores generalmente correctos. La pantalla, aunque bastante bien para ver contenidos, también puede ser bastante brillante en situaciones con poca luz.
Diseño
En términos de diseño, Asus ha hecho un buen trabajo con los acabados y con la ergonomía del equipo. El VivoBook X512DK pesa apenas 1,6 Kg, bastante ligero teniendo en cuenta el tamaño de la pantalla. El marco es además bastante pequeño, llegando a un 88% de proporción entre cuerpo y pantalla; esto en gran medida gracias a la tecnología NanoEdge.
Los acabados, además, se sienten bastante bien en las manos y lo más importante es que las superficies se pueden limpiar fácilmente y no atraen muchas huellas. De la misma forma, el teclado tampoco se ensucia fácilmente con el uso diario.
Escribir en el VivoBook15 es bastante agradable gracias al diseño ErgoLift de Asus. El computador, en esencia, está diseñado para que el teclado tenga una posición inclinada hacia el usuario. Esto resulta en que se reduce la fatiga de las manos y muñecas cuando se escribe por periodos largos. De la misma forma, el trackpad de equipo responde bastante bien y no provoca fatiga.
El posicionamiento de los puertos, además, es bastante bien pensado, aunque se echa de menos tener un par de puertos USB 3.0 adicionales.
Puertos y conectividad
Y pese a que extrañamos tener más puertos USB, en el tema de conectividad el equipo no se queda atrás. Además de los ya mencionados puertos USB 3.0, también cuenta con una salida HDMI, un lector de tarjetas, entrada de 3,5 mm para audífonos e incluso un puerto tipo USB-C.
Sin embargo, y para mantener el diseño delgado, Asus ha optado por no incluir una entrada Ethernet. Los usuarios que deseen usar Internet cableado deberán comprar un adaptador USB. Pese a eso, nunca hubo problemas con el wifi, y el portátil nunca perdió conectividad.
En el apartado inalámbrico, el VivoBook cuenta con el estándar Wi-Fi 5 y con un adaptador dual band ac. El equipo estuvo conectado todo el tiempo a la frecuencia de 5GHz y las velocidad siempre fueron bastante decentes y sin interrupciones, sobre todo descargando contenidos como videojuegos.
Batería de Asus
En el apartado de batería, el equipo aguantó hasta 3 horas de trabajo ligero con varias pestañas abiertas en Chrome y reproduciendo música o video. Este consumo es bastante justo y se debe en gran medida al bajo consumo del chip de AMD.
Cargar la batería hasta su totalidad no tarda más de 1 hora, y el cargador incluído es bastante compacto y con un cable de 2 metros que permite más movilidad incluso cuando se está conectado.
Cabe mencionar, sin embargo, que no es recomendable hacer uso de aplicaciones gráficas intensivas sin estar conectados a la pared. En primer lugar, el sistema operativo Windows 10 restringe el uso de la CPU y GPU para preservar la batería. Esto, en últimas, se traduce en menor desempeño en videojuegos y un consumo acelerado de la batería.
Temperatura y ruido
En términos de temperatura, el chip 3500U está diseñado para soportar temperaturas de hasta 95°C. En un portátil, este tipo de temperaturas son raras, aunque el VivoBook15 por lo general llegaba hasta los 85°C en situaciones muy intensivas.
Con una temperatura ambiente de 18°C, los sensores térmicos registraban un promedio de 38°C cuando no se realizan tareas. Esto se traduce en que el equipo es bastante silencioso haciendo tareas diarias y que no demandan mucho.
Haciendo nuestras pruebas, la temperatura de la CPU nunca pasó los 90°C, mientras que la 540X nunca pasó los 85°C. Corriendo a estas temperaturas, sin embargo, el equipo deja de ser silencioso y los ventiladores andan en promedio a 1.800 RPM, provocando un ruido que ronda los 40 decibeles. No es tanto como para ser insoportable, pero sí es notable en ambientes silenciosos.
Pese a esto, el diseño del equipo hace que el sonido no sea tan prevalente, ya que la mayor parte de aire es arrojada hacia la pantalla en vez de a los lados o por debajo del equipo.
Voltajes y overclocking
En el apartado de voltajes, el chip corre constantemente a 0,7 voltios, que no tienen mayor problema para llegar a los 3,7 GHz prometidos en aplicaciones gráficas y videojuegos. Cabe resaltar, además, que no es recomendable modificar los voltajes de fábrica en portátiles.
En este caso en particular, dado que las temperaturas tienden a estar en los 80°C no se tiene mucho espacio térmico para poder extraer rendimiento extra del chip Ryzen. De la misma forma, estos chips están bloqueados de fabrica para prevenir desgaste innecesario de los componentes.
Sin embargo, el Ryzen 3500U cuenta con la tecnología cTDP, o Potencia de diseño térmico configurable. Esto permite al usuario modificar el consumo en vatios para obtener un desempeño más acorde a las necesidades propias. En este caso, la configuración mínima es de 12W y la máxima de 25W. Los 10W de más resultan en un rendimiento un poco mejor, aunque su uso principal es para aplicaciones intensivas.
Dicho esto, no es aconsejable intentar hacer overclocking y simplemente limitarse a modificar la cTDP desde las mismas aplicaciones que ofrece AMD.
Benchmark sintéticas
Llegamos entonces a el primer apartado de pruebas. En primer lugar tenemos las benchmarks sintéticas que sirven para comparar el equipo con otros. Las primeras pruebas las hicimos en Cinebench R15 y R20, cada una con 3 intentos para después sacar un promedio. Seguidamente usamos PCMark 10, la suite de productividad que más se ajusta al mercado del Asus VivoBook 15.
Adicionalmente, corrimos pruebas en 3DMark 10 Time Spy, UserBenchmark y en 7zip para tener una mejor idea de las capacidades de compresión y descompresión del chip AMD.
Benchmark | Puntaje promedio (3 pruebas) | Temperatura (°C) | Ruido ventiladores (dB) |
---|---|---|---|
Cinebench R15 | 565 | 94 | 42.9 |
Cinebench R20 | 1095 | 75 | 35.2 |
PCMark 10 | 3670 | 85 | 36 |
3DMark | 870 | 67.7 | 41.6 |
En el caso de 7zip, todas las cifras están dadas en MIPS (Millones de instrucciones por segundo)
7zip | Puntaje (MIPS) |
---|---|
Prueba 1 | 3285 |
Prueba 2 | 3260 |
Promedio | 3275.2 |
Benchmark juegos
En el apartado de videojuegos, hemos corrido algunos de los títulos más populares por un espacio de una hora. En el caso de League of Legends, las configuraciones estaban en Alto, mientras que para Dota 2 estaban en Medio. Fornite y Overwatch estaban configurados ambos en medio con la resolución nativa de 1.366×768 píxeles, entregando así una calidad de imagen HD.
También medimos la temperatura de la APU para que pueda tener una mejor idea de qué tan caliente corre el computador. En cuanto a ruido de los ventiladores, al igual que con las pruebas sintéticas, el valor oscilaba alrededor de los 41 dB. No muy alto, pero puede ser molesto después de varias horas de juego.
Juego | Min FPS | Max FPS | Promedio | Temperatura (°C) |
---|---|---|---|---|
League of Legends | 77 | 149 | 98.7 | 78.9 |
Dota 2 | 12 | 61 | 41.2 | 88.6 |
Fortnite | 12 | 72 | 66.4 | 87 |
Overwatch | 9 | 40 | 29.4 | 87.5 |
También probamos el benchmark oficial de Final Fantasy XIV, ya que es un juego que demanda de la CPU y de la GPU por partes iguales. Usamos la configuración Alta (Laptop) y al final de las pruebas se obtuvo una calificación Alta.
FFXIV | Puntaje | Temperatura (°C) |
---|---|---|
Prueba 1 | 4153 | 84 |
Prueba 2 | 3683 | 86 |
Promedio | 3918 | 85 |
Pensamientos finales
El Asus VivoBook X512DK es un computador enfocado a tareas de productividad y de entretenimiento casual. Creemos que esta meta se cumple y que el computador responde bastante bien a casi todas las tareas que le pusimos. La usabilidad del paquete fue bastante agradable, e incluso durante las largas sesiones de gaming no hubo mucha fatiga gracias a su ergonomía.
En las labores diarias es un equipo muy fácil de usar, gracias a su disco de estado sólido y al procesador de AMD. Cabe anotar que incluso cuando teníamos corriendo las tareas más demandantes, nunca experimentamos congelamientos o pérdida de responsividad. Esto se lo atribuimos al 3500U, que al igual que sus hermanos mayores Ryzen 5 maneja muy bien la computación en paralelo y son ideales para realizar varias tareas al mismo tiempo.
Los nuevos chips de AMD tienen un consumo energético bastante bajo, algo importante de remarcar si tenemos en cuenta que durante años el silicio de Intel estaba muy asentado como el más eficiente para bajo consumo.
Las temperaturas tienden a ser un poco altas, sobre todo cuando se corren tareas intensivas por más de 1 hora, y por eso recomendamos asegurarse de que el equipo esté en áreas adecuadamente ventiladas cuando se necesite. Todo esto para proteger la vida útil de los componentes de la tarjeta madre (VRM en particular). Para juegos y herramientas de rendering muy avanzadas, recomendamos buscar equipos diseñados para eso.
En resumen, es un equipo pensado para usuarios intermedios, que además de realizar tareas ligeras también en ocasiones necesiten correr programas intensivos. En el apartado de gaming, el VivoBook se defiende bastante bien con un uso relativamente casual y con juegos no tan demandantes (tipo League of Legends o Counter Strike). Con un rendimiento muy balanceado, su bajo consumo y su diseño confortable, el Asus VivoBook 15 es un recomendado de la gama media.