El lunes 29 de noviembre, Jack Dorsey renunció a su posición como CEO en Twitter. Dorsey fue cofundador de la compañía en 2006 y lideró al gigante de las redes sociales durante épocas marcadas de polémica, como los 4 años de la presidencia de Donald Trump y los llamados para que la compañía imponga mejores estrategias de regulación.
La salida de Dorsey de la compañía marca un cambio importante para Twitter, que desde 2015 encara críticas por parte de inversionistas debido a razones financieras, e incluso críticas desde Washington debido a regulaciones que políticos del partido Republicano estadounidense han visto como censura. Incluso en Colombia, a la red social le han llovido críticas por parte de sectores conservadores debido a sanciones a la cuenta del expresidente Álvaro Uribe.
Haciendo un poco de memoria
Pese a que Jack Dorsey fue cofundador de Twitter en 2006, no fue el CEO de la compañía durante todos estos años. Entre 2006 y 2008 Dorsey ejerció como CEO de Twitter, en donde según reportes de la época se enfocó más en mejorar el servicio y disminuir o eliminar momentos en donde la red social se caía.
De hecho, para 2008, Twitter no estaba pensada para generar dinero, sino que muchos de sus despliegues estaban pensados para mejorar la experiencia de usuario y unificar procesos para que Twitter reforzara la simplicidad que la diferencia de redes sociales como Facebook. En 2008, el ejecutivo fue reemplazado como CEO por Evan Williams –otro cofundador de Twitter– debido al bajo rendimiento no solamente de la compañía, sino de Dorsey en su rol como director ejecutivo.
Entre 2008 y 2015 Dorsey hizo parte del consejo administrativo de Twitter, colaborando con Williams y con Dick Costolo –CEO entre 2011 y 2015– en convertir a la red social en el titán que es hoy en día. Durante el tiempo que Dorsey estuvo en Twitter, en muchas ocasiones también salió a relucir un poco su enfoque hacia el lado humano de las redes sociales.
En 2009, por ejemplo, retrasó un tiempo de mantenimiento programado debido a que la plataforma se había convertido en el corazón de la revolución que se llevaba a cabo en Irán. De la misma forma, Dorsey también ha estado a la cabeza de cambios de usabilidad, como por ejemplo que las fotos y los enlaces no contaran en el límite de caracteres –140 en esa época–.
Desde 2015 Dorsey también se ha convertido en la cara legal de Twitter frente al gobierno de Estados Unidos, testificando en investigaciones acerca de las elecciones estadounidenses de 2016 e incluso hablando cara a cara con el entonces presidente Donald Trump, para mejorar la civilidad de la plataforma.
La razón principal de su partida
Cabe aclarar que en esta ocasión la salida de Dorsey se debe principalmente a razones personales. Esto se diferencia a marzo de 2020, cuando el fondo de inversión Elliot Management intentó liderar una iniciativa para reemplazarlo como CEO. Según Elliot, la atención de Dorsey estaba dividida entre dos compañías: Twitter y Square.
Square es una compañía de pagos cofundada por el mismo Dorsey en 2009 que hoy en día está avaluada por encima de los 100.000 millones de dólares, principalmente gracias a el lanzamiento de aplicaciones como Cash App. Elliot también afirmó que Twitter se quedaba atrás en el espacio de las redes sociales, no solamente en su valor en el mercado sino también en la implementación de nuevas funciones.
En últimas, la iniciativa de Elliot fracasó, aunque sí logró crear un comité interno que ha hecho una evaluación constante sobre el rol de CEO desde el año pasado. Para responder a las críticas, Dorsey anunció planes para duplicar los ingresos de Twitter para 2023, así como la implementación de funciones como Twitter Spaces y las Suscripciones.
Sin embargo, esta salida se debe principalmente a algo que Dorsey mismo ve como una limitación: sus fundadores. “En últimas creo que es extremadamente limitante y un punto único de fracaso”, explicó Dorsey en un correo oficial. Aunque su visión ha sido crítica para dirigir a Twitter, Dorsey también afirmó: “He trabajado fuertemente para asegurar que esta compañía pueda separarse de su fundación y sus fundadores”.
En el mismo correo, Dorsey anunció públicamente el nombre de su sucesor: Parag Agrawal. Aunque no es un nombre conocido, el CEO de salida no escatimó los halagos, asegurando que la confianza que tiene en Agrawal es muy alta.
¿Quién es Parag Agrawal?
Agrawal se unió a Twitter en 2011 como ingeniero, y en sus 10 años ha apoyado algunas de las decisiones más importantes para la compañía. Desde 2017 ejerció como CTO –Chief Technology Officer–, y su visión ha llevado a la descentralización de Twitter por medio de iniciativas como Bluesky, la creación del equipo de criptomonedas en Twitter y la resolución problemas de autenticación y contraseñas a gran escala.
Según Dorsey, Agrawal ha sido su opción principal desde hace algún tiempo, recalcando que es alguien que “lidera con corazón y alma”. Así mismo, también asegura que el nuevo CEO entiende profundamente a Twitter y sus necesidades, añadiendo que ha estado detrás de todas las decisiones críticas que han ayudado a dirigir a Twitter hacia nuevos horizontes.
La naturaleza de Agrawal lo ha convertido en un líder escondido del ojo público durante su tiempo en Twitter, pero su liderazgo lo han convertido en la decisión unánime por parte de inversionistas y del mismo Dorsey. En su rol como CEO, deberá no solamente entregar los resultados de muchas iniciativas internas, sino también manejar el escrutinio cada vez mayor por parte de gobiernos y entes regulatorios.
Dorsey deja Twitter con la seguridad de haber expandido la visión de una red social abierta en todos sus empleados y en los nuevos líderes de la compañía. “Estoy agradecido por el servicio que has construído, la cultura, alma y las metas que has fomentado en nosotros”, le escribió Agrawal a Dorsey. Horas antes de anunciar su salida, en la madrugada del domingo 28, Dorsey hizo su tuit final como CEO: “Amo Twitter”.
Imagen principal: Jeremy Bezanger en Unsplash