Si bien no hay una conclusión definitiva al respecto, algunos expertos afirman que la comprensión de lectura en los formatos digitales es más difícil que en los textos en papel. ¿Qué hacer al respecto?
Por Bernardita Vial Lavín* y Patricia E. Jaramillo Marín, PhD en Ciencias de la Educación.**
Este 2020 nos ha enfrentado a un nuevo desafío, la pandemia generada por el COVID-19. Su llegada ha significado un cambio radical en los estilos de vida alrededor del mundo. El 6 de marzo se reportó el primer caso en Colombia y, en el momento de escribir este artículo (marzo 31), se contabilizan más de 900 personas oficialmente contagiadas en el país. El Gobierno nos ha llamado a quedarnos en casa, a estudiar y trabajar desde ella. Los niños, niñas y adolescentes no están asistiendo a los colegios desde el lunes 16 de marzo. Y esto es global: según la Unesco, cerca de 850 millones de niños alrededor del mundo –la mitad de la población estudiantil– han tenido que interrumpir abruptamente sus estudios.
Las instituciones educativas han debido enfrentar este nuevo escenario de manera repentina. En particular, la educación básica en Colombia ha recibido un fuerte impacto, pues tradicionalmente se ha basado en la presencialidad de los estudiantes y profesores en las aulas. Secretarías de Educación e instituciones educativas hacen grandes esfuerzos para generar guías y recursos, tanto digitales como en papel, que permitan a los estudiantes continuar con sus labores académicas.
Actualmente tenemos el privilegio de que la tecnología está preparada para enfrentar una pandemia como esta, pero, ¿lo están nuestros sistemas educativos?, ¿los profesores?, ¿los padres? y ¿los estudiantes?
La situación de estudiantes y docentes desde sus casas
Seguir utilizando las Tecnologías de Información y Comunicaciones (TIC) como medios de apoyo implica un reto para todos los actores del sistema educativo. Por un lado, muchos profesores no están acostumbrados a realizar clases virtuales y, en algunos casos, tampoco a enviar tareas basadas en el uso de las TIC. Por otra parte, en casa, los padres también deben lidiar con un nuevo desafío: manejar el trabajo académico de sus hijos, muchas veces como una carga adicional a sus teletrabajos.
Abordar toda la problemática que genera el paso del aprendizaje presencial al aprendizaje a distancia o al virtual será un tema para un próximo artículo; en este nos centraremos en un elemento crucial para cualquier tipo de aprendizaje y en cualquier disciplina: la comprensión de lectura.
La comprensión lectora implica varios desafíos para el lector: decodificar y reconocer las palabras que se encuentran en el texto, tener el conocimiento previo necesario, conocer los propósitos de la lectura, utilizar estrategias de lectura y lograr representar en la propia mente lo que el autor pretende comunicar. Estos desafíos ponen en juego una serie de funciones ejecutivas y habilidades cognitivas que se pueden ver afectadas si el texto por leer está en formato digital o está impreso en papel.
Si bien los expertos en lectura aún no han llegado a una conclusión definitiva sobre la comprensión lectora a través de medios digitales, un grupo importante de ellos sugiere que se presenta mayor dificultad en la comprensión de textos digitales que en la de textos en papel. Cuando los textos digitales contienen enlaces (hipervínculos), las diferencias en comprensión se acentúan.
Dada la necesidad de adecuarse a la situación actual de homeschool, en la que forzosamente nos encontramos, y teniendo en cuenta la realidad tecnológica en la que vivimos, consideramos importante generar unas propuestas para que educadores, madres y padres atiendan las dificultades que puedan tener los estudiantes para comprender los textos que deben leer en formato digital.
Para comenzar, vamos a abordar la lectura de textos digitales lineales, es decir, textos que no contienen hipervínculos. En la primera columna se encuentran algunas variables que intervienen en el nivel de comprensión lectora de este tipo de textos, en la siguiente columna están las recomendaciones para profesores y, en la última, para los padres.
Variable | Profesores | Padres |
USO DEL TIEMPO Quienes leen bajo presión temporal comprenden menos si el texto está en formato digital que si está impreso. No hay diferencia en el nivel de comprensión cuando el lector tiene libre disponibilidad de tiempo para su lectura. | Organizar las tareas de lectura digital que se enviarán durante la semana, considerando una anticipación suficiente para que los alumnos puedan leer sin presión de tiempo, de forma tal que su desempeño no se vea afectado por este factor. Asignar a cada tarea un tiempo adicional de lectura con respecto al tiempo que asigna en el aula, con el fin de que los estudiantes lean con calma las instrucciones y los textos, y puedan comprenderlos mejor. | Apoyar a los hijos en la distribución de su tiempo en casa. Crear con ellos un horario diario y semanal que considere tiempos adecuados de estudio y descanso. Los tiempos acordados deben respetarse para que el estudiante logre concentrarse en la tarea que está realizando. Recuerde tener en cuenta los ritmos de aprendizaje. Por ejemplo, para niños de primaria se sugiere que por cada hora de trabajo académico tengan al menos 15 minutos de descanso. Con adolescentes los horarios académicos pueden ser más prolongados. Siempre fijarlos en consenso con ellos y hacer que los cumplan. |
TIPO DE TEXTO Hay diferentes tipos de texto, pero en el entorno escolar priman el texto narrativo, que presenta y describe situaciones, y el texto informativo, que presenta información y datos. Las investigaciones plantean que se logra el mismo nivel de comprensión cuando se lee un texto narrativo en papel o en formato digital. Pero si el texto es informativo, la comprensión es mucho menor en formato digital. | Intentar enviar lecturas narrativas a los estudiantes más pequeños, ya que los textos informativos pueden ser más difíciles de comprender. Procurar que la longitud del texto se vaya incrementando de acuerdo con la edad del estudiante. Redactar en detalle las instrucciones de las tareas que deben desarrollar los alumnos, para favorecer que las comprendan de forma adecuada. | Leer las instrucciones de las tareas con los hijos, para asegurarse que tienen claro los pasos por seguir para completar su tarea. Buscar un lugar tranquilo en la casa para que el estudiante pueda realizar sus lecturas sin distractores o interrupciones. |
TIPO DE DISPOSITIVO ELECTRÓNICO Cuando se lee en un computador de escritorio, se ve una disminución de la comprensión lectora en relación a la lectura en papel. Cuando el lector requiere hacer scroll dentro del texto, requiere prestar atención en orientación espacial y en el manejo de algún artefacto para desplazarse en el texto, lo que desplaza esfuerzos que podrían dedicarse a comprender el contenido leído. Algo muy importante es que la comprensión lectora no se ve afectada cuando el aparato electrónico puede sujetarse con la mano, como un libro. | Tener en cuenta que no todos los estudiantes tendrán tabletas o celulares, lo que puede dificultar la comprensión de las tareas. Por lo tanto, se sugiere abrir un canal de comunicación directo con los alumnos, para que puedan resolver posibles dudas de comprensión durante la realización de sus tareas. | De ser posible, intentar que las lecturas sean hechas en un aparato electrónico que puedan sostener en sus manos, ya sea tabletas o celulares. Y que se haga uso del computador solo para trabajos escritos u otros que no demanden alto esfuerzo en comprensión lectora. |
EXPERIENCIA DIGITAL Es necesario tener habilidades para usar productivamente el computador, pero esto, y contar con variados recursos tecnológicos, no mejora la comprensión lectora digital, incluso puede disminuirla. Entre más experiencia digital tenga el lector, mayor será su comprensión lectora. La comprensión puede disminuir, así el lector sea muy hábil manejando la tecnología, si está acostumbrado a utilizar Internet para tareas rápidas y de pronta recompensa. | No suponer que por haber nacido en una era tecnológica, los alumnos tendrán mayor facilidad en la comprensión lectora digital. Considerar en las tareas que se les envíe a los estudiantes el esfuerzo extra que ellos estarán haciendo para comprender incluso las instrucciones, que ahora se entregarán por escrito en una pantalla. Procurar que las tareas contemplen extraer la información relevante del texto y las ideas principales, redactar conceptos en las propias palabras del estudiante, hacer un listado de palabras clave del texto, hacer mapas conceptuales, gráficos u otras herramientas que faciliten la comprensión lectora. | Apoyar a sus hijos cuando se vean confundidos o en apuros con la comprensión de algún texto, y no asumir que por ser quienes tienen mayor manejo digital pueden comprender mejor lo que leen en las pantallas. Si los estudiantes manifiestan que no comprenden un texto, dialogar con ellos, preguntarles cuál es la idea principal, qué pueden inferir, cómo pueden relacionar el texto con algo que ya saben. De esta forma se invita a lograr en equipo (padre/hijo) la comprensión de lo leído. |
EXCESO DE CONFIANZA Los lectores tienden a sentirse más confiados en sus resultados cuando leen en formatos digitales, a pesar de que sus resultados en textos impresos son mejores. Este exceso de confianza y la rapidez de las interacciones digitales pueden llevar a que el lector no tenga una buena calidad de atención, habilidad necesaria para la comprensión de lectura. | Solicitar a los alumnos que revisen cuidadosamente sus tareas antes de enviarlas. Insistir en que presten atención a la ortografía, la redacción, el formato, la coherencia de las ideas y que su tarea responda a lo solicitado. Esto hará que tarden más tiempo en tener la versión final de las tareas. | Recordar la importancia de revisar el trabajo realizado antes de entregarlo, incluso cuando los estudiantes se sientan seguros de que lo hicieron bien. Intentar que los niños o adolescentes cuenten con hojas en blanco (ya sea cuadernos antiguos a los que les hayan quedado hojas libres u otros), para que puedan tomar notas y apoyar su lectura digital. |
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El papel de los enlaces en la comprensión de lectura
Como dijimos anteriormente, estas recomendaciones pueden ser utilizadas para textos lineales. Si la tarea requiere comprensión de textos con hipervínculos, entran en juego 3 habilidades que se interconectan entre sí: navegar por una secuencia coherente de hipervínculos, evaluar la relevancia y confiabilidad de la información que se lee, y seleccionar e integrar la información que se recibe de los distintos hipervínculos.
Para estos casos, siguiendo los estudios de los expertos en lectura digital, entregamos las siguientes recomendaciones para ayudar a desarrollar en los estudiantes estas 3 habilidades:
1. Navegar por los hipervínculos:
Para apoyar al estudiante a comprender hipertextos, se debe tener en cuenta qué tipo de lector de hipervínculos es. Se han identificado 3 tipos de lectores: los buscadores de conocimientos, que se enfocan en los contenidos del texto; los exploradores de características, que se enfocan en información no-textual, y los buscadores superficiales, que destinan cortos períodos de tiempo en el contenido del texto y pasan de una fuente a otra en forma aleatoria. Como es de esperarse, los buscadores que se enfocan en los contenidos son los que logran mejores niveles de comprensión y por tanto de construcción de conocimiento. Con base en esto, las recomendaciones son:
- Solicitar a los alumnos que anoten las ideas principales de lo que acaban de leer y las conecten con el objetivo de la lectura. Esto será de mucha utilidad para los buscadores apáticos.
- Entregar un organizador gráfico con las palabras clave que deberán ir guiando la navegación y cómo estas palabras se conectan para dar una comprensión coherente del texto.
- Procurar que las imágenes, videos y audios de estos textos cumplan una función en la comprensión del mismo. Es decir, que complementen, presenten ejemplos, visualicen procesos o planteen interrogantes sobre el contenido del texto escrito. Estos recursos deben dar valor agregado al texto lineal.
2. Evaluar la relevancia de la información
- Presentar un listado de palabras clave que deben aparecer en el hipertexto que están leyendo.
- Entregar instrucciones específicas, no tan globales, de manera que los estudiantes puedan tener mayores criterios para realizar la navegación e identificar la relevancia de la información.
- Motivar a sus alumnos a que contrasten la información nueva que están leyendo con los conocimientos previos que tenían sobre el tema, para identificar si esta nueva información es un aporte fidedigno a su estudio.
3. Integrar la información
- Entregar una breve reseña sobre el objetivo de la lectura, para así activar los conocimientos previos de los alumnos y facilitarles la detección de inconsistencias en la información.
- Incentivar a los alumnos a definir claramente el problema por estudiar y el tipo de información que requieren para comprender el texto.
- Intentar que los estudiantes monitoreen la coherencia entre los textos de cada hipervínculo, para que puedan lograr una adecuada comprensión de la globalidad.
- Releer lo leído (sea para lograr su comprensión, ampliación o profundización).
- Fomentar que los estudiantes planteen preguntas sobre el texto global.
- Asociar las actividades de lectura con la producción de textos.
* Bernardita Vial Lavín es magister en Psicología educacional de la Universidad Católica de Chile.
** Patricia E. Jaramillo Marín es investigadora y académica, con énfasis en la integración de las TIC en los procesos educativos.
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Este artículo se apoya en las siguientes fuentes:
- Delgado, P., Vargas, C., Ackerman, R., & Salmerón, L. (2018). Don’t throw away your printed books: A meta-analysis on the effects of reading media on comprehension. Educational Research Review, 25, 23-38.
- Kintsch, W. (1998). Comprehension: A paradigm for cognition. Cambridge, MA: Cambridge University Press.
- Salmerón, L., Strømsø, H.I., Kammerer, Y., Stadtler, M., & van den Broek, P. (2018). Comprehension processes in digital reading. In M. Barzillai, J. Thomson, S. Schroeder, & P. van den Broek (Eds.), Learning to read in a digital world (pp 91-120). Amsterdam: John Benjamins.
- Unesco (2020). La mitad de la población estudiantil del mundo no asiste a la escuela: la Unesco lanza una coalición mundial para acelerar el despliegue de soluciones de aprendizaje a distancia. Consultado el 24/03/2020 en https://es.unesco.org/news/mitad-poblacion-estudiantil-del-mundo-no-asiste-escuela-unesco-lanza-coalicion-mundial-acelerar